Hoy nos remontamos algunos años atrás para contar curiosidades sobre la historia de las fachadas y los mejores revestimientos. Y es que una curiosidad o particularidad de las fachadas es que su término propiamente dicho, proviene del italiano. Concretamente de la palabra «facciata» y este concepto representa el conjunto de caras exteriores de un edificio o estructura.
Con el tiempo el término se fue utilizando para hacer referencia a fachada principal, trasera o lateral. El papel tan importante que ocupa este término es sencillamente porque tanto la fachada como el material del que valla revestidos, son pilares básicos y necesarios de la construcción. Es decir, «no se puede empezar la casa por el tejado».
Por otro lado, la fachada como principal finalidad es la de adaptarse a las necesidades climatológicas de su zona geográfica para que afecten dichos «problemas climatológicos» a las estructuras internas del edificio. Por eso a lo largo de la historia, el sistema de revestimiento de fachadas ha ido mejorando y potenciando el desarrollo de nuevos materiales para su uso.
Actualmente existen muchos estilos arquitectónicos nuevos y diversos tipos de revestimientos de fachadas que se adaptan a cada necesidad específica. Por un lado, encontramos la fachada ligera y por otro lado, la fachada pesada. Esto variará en función de sus materiales. Por supuesto, en base al tipo de fachada existes subtipos de materiales que la componen.
En el caso de las fachadas ligeras, existen dos tipos. Muro cortina y fachada panel. Estas fachadas están preparas para soportar mucho peso. Contribuyen a mejorar su estabilidad del edificio. En este caso los materiales que suelen utilizarse suele ser el vidrio o el metal. ¿Ventajas que tiene este tipo de fachada? Facilidad de instalación y mucha luminosidad, logrando resultados muy estéticos.
Por otro lado en el caso de la fachada pesada, también puede ser de diversos tipos. prefabricada, tradicional, sistema sate, ventilada… En esta caso, este tipo de fachada tal y como su nombre indica se tienden a utilizar elementos pesados. Generalmente superior a 100kg por metro cuadrado.